#16. Cómo Protegerte de la Inflación. Deja que tu Instinto te Ayude. Lo Difícil es Bueno porque es Difícil
No Solo Suerte - 13 mayo 2023
Hola! Soy Rafa Sarandeses.
Los atletas entrenan. Los artistas ensayan. Por eso, todas las semanas ayudo a tu cerebro a hacer flexiones con un cocktail de 3 ingredientes: una reflexión, una idea útil, y una cita que te haga pensar.
Un cocktail para ayudarte a ser cada día mejor en lo tuyo.
1. Reflexión: Cómo Protegerte de la Inflación
Un día una persona muy lista me dijo que en la vida había que tener mentores virtuales. Esos que nunca llegas a conocer pero de los que puedes aprender en libros, conferencias o… en juntas de accionistas.
Para mí esos mentores virtuales son, desde hace muchos años, Warren Buffett y su socio Charlie Munger.
Según Buffett, Munger tiene el mejor "30-seconds brain" que ha conocido nunca. Si quieres aprender de este genio absoluto, te recomiendo leer "Poor Charlie's Almanack" o leer en internet la transcripción de sus muchas conferencias.
Pues bien, estos abueletes - de 92 y 99 años de edad - dirigen todavía hoy la mítica Berkshire Hathaway y son dos de los mejores inversores de la historia.
Como buen "mentee virtual", muchas veces pienso... ¿qué haría mi amigo Warren en esta situación? Parece una tontería, pero me ayuda a tomar una perspectiva diferente. Hacerlo me saca de mi modo de pensar por defecto.
A lo que iba: todos los años, en estas fechas, se celebra la mítica junta de accionistas de la compañía, el llamado "Woodstock para capitalistas", en su sede de Omaha. A lo largo del evento, ambos dedican horas y horas a responder en directo a todo tipo de preguntas de sus accionistas.
El año pasado le hicieron a Buffett una pregunta interesante: "¿cómo podemos protegernos contra la inflación?"
A lo que Buffett respondió:
“Lo mejor que puedes hacer es trabajar en ser excepcionalmente bueno en algo. Nadie puede depreciar tus habilidades si éstas aportan valor. Por eso, la mejor inversión, con diferencia, es invertir en mejorarlas. ¡Además no pagarás impuestos por ello!”
Para la mayoría de nosotros, la forma más efectiva para lidiar con la inflación es mejorar constantemente nuestra capacidad de aportar valor.
Alguien con una alta competencia en algo para lo que existe mucha demanda tendrá más poder negociador que el resto para fijar precios, Y si trabajas por cuenta ajena, estarás mejor posicionado para pelear una subida de sueldo.
Quizá sea el momento de hacer ese curso que parece caro a corto plazo pero que puede mejorar tus credenciales profesionales y el valor que aportas. Es probable que el retorno a 5-10 años sea varias veces tu inversión inicial.
Si te sirve un ejemplo, yo recuperé la inversión que hice en certificarme como coach en USA en menos de 6 meses. A día de hoy, con los números en la mano, sé positivamente que no he hecho una inversión más rentable en toda mi vida.
Así que toma las riendas y asume que tu carrera es “Tu Carrera S.L.”, una empresa en la que eres CEO. Invierte recursos en mejorar el valor que aportas y te protegerás contra todo aquello que no puedes controlar. Incluida la inflación.
Porque como dice el gran Peter Senge:
"Tu única ventaja competitiva real es tu capacidad de aprender más deprisa que tus competidores."
2. Idea útil: Deja que tu Instinto te Ayude
A veces nos cuesta tomar una decisión porque no dejamos hablar a nuestro instinto.
Tratamos de racionalizar las cosas (¡quien no ha hecho las típicas listas de pros y cons!), y eso hace que decidir sea mucho más complicado. A veces incluso llevándonos a la típica “parálisis por análisis.”
Un truco para evitar este filtro racional es este:
Si no puedes decidirte entre dos opciones, tira una moneda al aire. Pero no decidas en función del lado que haya salido. Decide en función de la reacción emocional que te genere ver qué lado ha salido.
Pruébalo. Es curioso lo bien que funciona. Y funciona porque muchas veces tu instinto sabe lo que tienes que hacer. Solo tienes que encontrar el modo de escucharlo.
3. Cita para Pensar:
“Muchas personas asumen que no se les da bien escribir porque es difícil. Esto es como asumir que eres malo haciendo pesas porque las mancuernas pesan mucho.
Escribir es útil porque es difícil. El esfuerzo que requiere escribir una frase bien hecha es justo lo que hace que ese ejercicio te ayude a pensar mejor".
- James Clear
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